El 12 de mayo se celebra el día internacional de la enfermería en conmemoración del nacimiento de Florence Nightingale, precursora de la enfermería moderna y como ella misma dijo “la enfermería es un arte... requiere una devoción tan exhaustiva y una preparación tan dura... es la más bella de las bellas artes”. Este concepto establece una clara distinción entra la medicina, entendida como el arte de curar y la enfermería, el arte de cuidar, que desde sus inicios ha estado estrechamente entrelazadas y caminando en paralelo.
Enfermería es considerada por muchos un arte y una ciencia del cuidado, con acciones polivalentes, altamente flexibles, con gran contenido multidisciplinario en las que hay que desarrollar el pensamiento crítico y la capacidad de análisis, y donde se exige además de competencias técnicas de muy alto nivel, empatía y cercanía con el paciente. Abarca la atención autónoma o en colaboración, dispensada a personas de todas las edades, familias, grupos y comunidades, enfermas o no. Comprende la promoción de la salud, la prevención de las enfermedades y la atención a los enfermos, discapacitados y personas en situación terminal.
Sin embargo y mas allá de la diversidad de la enfermería, los cuidados son la razón de ser de la profesión y constituyen el motor de nuestro día a día y por lo tanto nuestro foco de atención. El cuidado que ofrece el profesional de enfermería se centra en las necesidades que viven las personas entre diversas experiencias de salud.
La práctica de enfermería va mas allá de cumplir tareas rutinarias, requiere recursos intelectuales, de intuición para tomar decisiones, realizar acciones pensadas y reflexionadas que responden a las necesidades de cada persona con el roll propio de enfermería. Donde podemos aplicar un método científico en la práctica asistencial, que nos permite prestar cuidados de una forma racional, lógica y sistemática, atendiendo de forma individualizada las necesidades del paciente. Este proceso de atención de enfermería se realiza en cinco etapas:
• Valoración: proceso de recogida de datos.
• Diagnostico: enunciado de un problema real o potencial del paciente.
• Planificación: organización de un plan de cuidados, según prioridades.
• Ejecución: llevar a la práctica el plan de cuidados establecido.
• Evaluación: Valorar la eficacia y efectividad de los cuidados prestados.
Mejorando así la calidad asistencial y manteniendo una atención continuada.
Por esta gran labor desempañada, turno tras turno, queremos felicitar a todos los profesionales de enfermería. Muchas Felicidades!!!
María De Fátima Moreira Da Silva
Due Hosptien Roca